Si estás empezando a familiarizarte con conceptos de marketing digital o acabas de empezar a trabajar con una agencia de comunicación, probablemente has escuchado el término “copy”. En términos generales, un copy es el componente de texto que utilizamos en nuestras publicaciones y existen dos tipos principales:
- El copy de la imagen: este es el texto que viene dentro del diseño o arte que vas a publicar.
- El copy de la publicación: es la descripción, “caption” o el texto que acompaña al diseño gráfico, video o enlace que vas a publicar.
Aquí te lo mostramos:

Entonces, el copy de la imagen es el que dice “Cómo usar hashtags para Instagram · Sin pifiar en el intento” y el de la publicación es el que dice “¡No subestimes el poder de los hashtags!…”
El objetivo de estos textos es persuadir a tus clientes meta para que realicen una acción, como comprar un producto, ingresar a un enlace o brindar sus datos personales.
Aunque su uso más común en marketing digital es en contenido para redes sociales, también se puede considerar como “copy” los textos redactados para sitios web, aplicaciones, artículos, blogs, ebooks, ads, correos electrónicos, etc.
Y aunque parece una tarea sencilla, requiere un nivel de especialización y redacción intermedio-avanzado para ser realizado de una manera efectiva. De hecho, en la mayoría de agencias existe el puesto de “copywriter” para personas que se especializan en esta disciplina.

Un copy puede hacer o arruinar una campaña, así que aquí te dejamos algunos consejos para redactarlo:
1. Define tu cliente meta: ¿A quién le estás hablando? ¿Es a un universitario o a una señora de estatus económico alto que vive en el centro de la ciudad? Mientras más te puedas adentrar en la mente de tu cliente meta, más fácil te será entender cómo hablarle para captar su atención.
2. Plantea un objetivo: ¿Qué quieres conseguir con este texto? ¿Quieres hacer un primer acercamiento con tu cliente? ¿Quieres que la persona realice una compra? ¿Quieres que llene un formulario? Decide qué quieres con esta publicación en específico antes de empezar a escribir.
3. Mantenlo simple: Intenta no pasarte de un par de oraciones para que tus clientes no se pierdan leyendo. Sigue la regla de oro: una publicación, una idea. Y lo más importante de todo: que sea escaneable. A veces, cuando las personas ven párrafos de texto, lo que hacen es un breve escaneo de palabras clave para decidir si les interesa leer con detenimiento o no. Toma esto en cuenta a la hora de redactar tus textos.
4. Hazlo atractivo: Piensa en los intereses de tu cliente y úsalos para llamar su atención, siempre y cuando puedas relacionarlos con tus valores y personalidad de marca. Puedes usar analogías, chistes o alguna figura retórica que te ayude a captar la atención de tu cliente y construya identidad de marca.
Y recuerda: todo en marketing digital es probar, probar, probar. Aprovecha el bajo costo de los canales digitales y la adaptabilidad que te permiten hacer pruebas de tono, longitud y estilo de redacción de tus textos para identificar lo más atractivo para tus clientes.